La plaza del pueblo de Ojochal se llenó de niños, adultos y perros que llegaron a disfrutar de la navidad de una manera muy diferente y especial, entre sonrisas, juegos, aplausos, concursos y regalos.
Este año no solo las personas presentes en la actividad tuvieron oportunidad de divertirse, pues la fiesta también era para los grandes 
amigos de la casa; los perros, quienes acompañados por sus dueños fueron premiados en diferentes categorías, como el más pequeño, el más negro, blanco, obediente, flaco, grande y hasta el más café, pero de igual forma se premiaron a los que no ganaron. Todo con el fin de que ellos también tuvieran sus regalos navideños.
Luego de un rato de juegos, entre sonrisas y mucha diversión de los pequeños, apareció "Santa" 
como ya es costumbre desde hace varios años, Colacho llegó montando su caballo y en medio de aplausos procedió a entregarle regalos a los niños quienes de una forma muy ordenada hicieron fila, empezando por los más chiquititos.
Durante la entrega de los anciados presentes, "Santa" se portó muy amable, sonriente y con su popular -¡JO JO JO JO...Feliz navidad!- Sorprendía las caritas ilusionadas de decenas de niños que lo miraban esperando su turno.
Como parte de la actividad muchos de los pequeños, especialmente las niñas, lucieron sus caritas pintadas, gracias a la participación de una joven que se dedicó a plasmar el color en forma de animalitos sobre los rostros de los pequños que lo quisieran.
Al final los asistentes a la fiesta navideña se fueron muy satisfechos con
sus regalitos y grandes recuerdos de una actividad que se ha vuelto toda una tradición en Ojochal, gracias a la generosidad de muchas personas que realizaron la donación de juguetes para esta fecha tan especial, de la mano del Supermercado de esa comunidad y la colaboración de muchos vecinos, la navidad definitivamente es una fecha inolvidable en este pueblo.
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